Si todo el mundo supiera claramente cómo se sienten realmente los pilotos al respecto y cómo podemos ser proactivos a la hora de tomar las decisiones correctas, las cosas se moverían mucho mejor. Los conductores necesitamos libertad para conducir cuando queramos y cuando lo necesitemos. Esa libertad no tiene precio. Todo esto es nuevo para todos nosotros: la tecnología, los servicios, la oportunidad.